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Foto del escritorChristian Pichardo

De la Retórica a la Realidad ¿Cómo México Está Transformando su Estrategia Nacional contra la Demencia comparando 2014 vs 2024?

LO QUE DEBES SABER:


  • La demencia, principalmente causada por el Alzheimer, deteriora funciones cognitivas y afecta gravemente a personas mayores en México, comprometiendo su capacidad para llevar a cabo actividades diarias y afectando profundamente a sus familias.

  • La carga financiera de la demencia recae mayoritariamente en las familias, especialmente en las mujeres. A pesar de las promesas del Plan 2024, la falta de recursos y coordinación sigue siendo un desafío crítico para mejorar la atención y el apoyo a los afectados.

  • México lanzó el Plan Nacional de Demencia en 2014, enfocado en la detección temprana y apoyo familiar. Sin embargo, la falta de infraestructura limitó su efectividad. El Plan 2024 promete un enfoque más coordinado e integral, con un énfasis en el cuidado a largo plazo y la concientización pública.


¿Qué es la demencia y cómo afecta a la población mexicana?

La demencia es un síndrome caracterizado por el deterioro progresivo de las funciones cognitivas, afectando áreas como la memoria, el pensamiento, la orientación, el lenguaje y la capacidad de juicio. En México, como en muchas otras partes del mundo, la demencia se presenta principalmente en personas mayores y es provocada por diversas enfermedades neurodegenerativas, siendo la enfermedad de Alzheimer la causa más común.


Este trastorno afecta la capacidad de las personas para realizar actividades cotidianas y genera un impacto significativo en la calidad de vida de los pacientes y sus familias.


Datos sobre la prevalencia e incidencia de la demencia en México

En México, se estima que aproximadamente 1.3 millones de personas viven con demencia, una cifra que podría ascender a 3.5 millones para el año 2050 si no se implementan intervenciones efectivas. La prevalencia de demencia entre los mayores de 60 años es del 7.9%, con una mayor incidencia en mujeres y en áreas rurales. Cada año, se reportan alrededor de 27 nuevos casos de demencia por cada mil personas mayores de 60 años, lo que subraya la urgencia de abordar este problema desde una perspectiva de salud pública.


El costo de la demencia para las familias y la sociedad

Impacto Social y Económico: El costo de la demencia para las familias y la sociedad


El impacto de la demencia trasciende lo médico, generando un profundo desgaste social y económico. En México, las familias asumen hasta el 85% de los costos asociados con el cuidado de personas con demencia, lo que incluye la pérdida de ingresos por la reducción de horas de trabajo o el abandono del empleo para convertirse en cuidadores. Esta situación es especialmente crítica para las mujeres, quienes constituyen la mayoría de los cuidadores.


La ausencia de un sistema integral de cuidados a largo plazo agrava aún más esta problemática, haciendo de la demencia no solo un desafío médico, sino un problema social y económico de gran magnitud.


Estas cifras subrayan la urgencia de una respuesta contundente desde las políticas

de salud pública.



Aditum Institute realizó un análisis integral comparativo enfocándose en la evaluación crítica de los planes nacionales de demencia en México.


El análisis incluye una comparación detallada entre el Plan Nacional de Demencia 2014 y el Plan Nacional de Demencia 2024, destacando las fortalezas y limitaciones de cada uno. Aditum examinó la eficacia en la implementación de estrategias clave, la coordinación entre niveles de atención, y la viabilidad de las propuestas de políticas públicas



El Punto de Partida: Contexto del Plan Nacional de Demencia 2014

En 2014, México dio un primer paso audaz al implementar el Plan Nacional de Demencia 2014, un esfuerzo que buscaba responder a una creciente crisis de salud pública. En un país donde el envejecimiento poblacional se aceleraba, la demencia emergía como una amenaza silenciosa que ponía en jaque tanto a las familias como al sistema de salud. Este plan innovador se centraba en la detección temprana, la concientización, y el apoyo a las familias afectadas, proponiendo estrategias que, aunque creativas y disruptivas para su tiempo, pronto mostraron sus limitaciones frente a la magnitud del problema.



La Necesidad de Renovación: Presentación del Plan Nacional de Demencia 2024 y sus promesas

Diez años después, la situación exigía un nuevo enfoque. El Plan Nacional de Demencia 2024 surge no solo como una revisión de su predecesor, sino como una promesa de cambio real. Este nuevo plan reconoce las fallas del pasado y presenta una estrategia más ambiciosa y coordinada, prometiendo mejorar la integración del diagnóstico, fortalecer el apoyo a largo plazo y expandir significativamente las campañas de concientización. Se plantea un reto monumental: transformar las ideas en acciones concretas y efectivas.


¿Ha avanzado realmente México en la lucha contra la demencia?

Con el lanzamiento del Plan 2024, una pregunta resuena con fuerza: ¿Ha avanzado realmente México en la lucha contra la demencia, o estamos repitiendo errores con nuevas palabras? A lo largo de esta década, las cifras de prevalencia han seguido aumentando, y las promesas se han multiplicado. Sin embargo, la verda dera prueba radica en la capacidad del país para convertir estos planes en resultados tangibles que mejoren la vida de quienes sufren esta devastadora condición y de las familias que los apoyan. ¿Será el plan de 2024 la respuesta que México necesita, o solo otro intento en una lucha que aún no hemos ganado?


Estrategias de Diagnóstico: Del Tamizaje Inicial a la Integración Completa

2014: Diagnóstico Temprano y Protocolos Iniciantes

En 2014, el Plan Nacional de Demencia de México se propuso establecer un marco inicial para el diagnóstico temprano de la demencia, consciente de que la detección oportuna es crucial para manejar la progresión de la enfermedad. Se introdujo el tamizaje cognitivo en el primer nivel de atención como un paso fundamental para identificar posibles casos de deterioro cognitivo y demencia. Sin embargo, estos esfuerzos, aunque bien intencionados, se vieron limitados por la falta de un protocolo estandarizado y una capacitación adecuada de los profesionales de la salud, lo que resultó en una implementación desigual y, en muchos casos, ineficaz.


2024: Integración y Coordinación Mejores Prometidas

Frente a los desafíos persistentes, el Plan de 2024 llega con la promesa de una mayor integración y coordinación en el diagnóstico. Este nuevo enfoque busca articular el tamizaje cognitivo con protocolos de atención y seguimiento más robustos, garantizando que los diagnósticos tempranos se traduzcan en un manejo más efectivo y continuo de la enfermedad. La estrategia propone mejorar las capacidades diagnósticas y establecer una red más cohesiva entre los diferentes niveles de atención, asegurando que ningún paciente quede fuera del sistema. Este plan aspira a reorganizar los servicios existentes para optimizar recursos sin crear una carga adicional para el sistema de salud.


Al comparar ambos planes, es evidente que el enfoque de 2014 se centró en establecer las bases para la detección temprana, pero carecía de la infraestructura y la coordinación necesarias para garantizar su efectividad a largo plazo. En cambio, el Plan de 2024 promete una solución más holística, enfocada en cerrar las brechas que obstaculizaron los esfuerzos anteriores.


Sin embargo, la viabilidad de estas estrategias depende en gran medida de la capacidad del sistema de salud mexicano para integrar estos cambios sin perder de vista las limitaciones de recursos y la necesidad de una capacitación continua para los profesionales involucrados. Solo el tiempo dirá si este enfoque más integrado y coordinado puede superar los desafíos que enfrentó su predecesor.




Cuidados y Apoyo a Largo Plazo: Promesas Antiguas y Nuevas Estrategias

2014: Primeros Pasos hacia el Apoyo Familiar

El Plan Nacional de Demencia de 2014 reconoció la enorme carga que la demencia representa para las familias mexicanas, particularmente para las mujeres, quienes asumen la mayoría del trabajo de cuidado. En este contexto, se plantearon estrategias iniciales para ofrecer apoyo a los cuidadores, como la promoción de programas de respiro y la creación de centros de día. Sin embargo, estas iniciativas nunca se consolidaron en un sistema integral, dejando a muchas familias sin el respaldo necesario para enfrentar la exigente tarea de cuidar a un ser querido con demencia.


2024: Propuestas para un Sistema Nacional de Cuidados

El Plan de 2024 busca ir más allá de los esfuerzos fragmentados del pasado proponiendo la creación de un Sistema Nacional de Cuidados. Este ambicioso proyecto pretende institucionalizar el apoyo a largo plazo, proporcionando un marco donde las personas con demencia y sus familias reciban cuidados continuos y estructurados. Entre las propuestas clave se incluyen la expansión de los centros de día, el apoyo psicológico y financiero para los cuidadores, y la integración de las personas con demencia en un sistema de atención que no dependa exclusivamente del esfuerzo familiar.


Este enfoque marca un cambio significativo, aspirando a que el cuidado de la demencia sea una responsabilidad compartida entre el Estado y la sociedad.

Comparando los enfoques de 2014 y 2024, es innegable que las propuestas han madurado considerablemente. Mientras que el plan de 2014 ofrecía parches temporales, apenas arañando la superficie del problema, el Plan de 2024 se presenta con una ambición renovada y una visión más coherente y estructurada. Sin embargo, el gran reto no reside en la propuesta en papel, sino en la ejecución e implementación real de este Sistema Nacional de Cuidados.



La cruda realidad es que la falta de infraestructura y las restricciones presupuestarias amenazan con sofocar estas promesas antes de que puedan ver la luz del día. Además, la tan necesaria coordinación interinstitucional, que es clave para implementar un sistema de esta magnitud, sigue siendo el eslabón débil. Las oportunidades están sobre la mesa, pero el éxito dependerá de cómo y cuándo se enfrenten estos desafíos.


Concientización y Reducción del Estigma: Un Cambio Lento pero Necesario

2014: Campañas de Sensibilización y sus Limitaciones

En 2014, el Plan Nacional de Demencia de México abordó por primera vez la urgente necesidad de sensibilizar al público y a los profesionales de la salud sobre la demencia. Las campañas lanzadas se enfocaron en educar a la población y combatir los estigmas profundamente arraigados que acompañan a esta enfermedad. Sin embargo, estos esfuerzos, aunque bienintencionados, se encontraron con serias limitaciones de recursos, sumada a una coordinación insuficiente entre las instituciones, resultó en iniciativas que, en muchos casos, no lograron penetrar en la conciencia colectiva ni cambiar de manera significativa las percepciones erróneas sobre la demencia.


2024: Iniciativas Avanzadas como "Dementia Friends"

El Plan de 2024 introduce una nueva generación de estrategias, con iniciativas como "Dementia Friends", que buscan ir más allá de la simple sensibilización. Esta iniciativa global, adaptada a la realidad mexicana, pretende cambiar las actitudes y mejorar el entendimiento sobre la demencia a nivel comunitario. Con un enfoque en la formación de promotores comunitarios, "Dementia Friends" ofrece sesiones educativas que buscan crear una red de apoyo social más amplia y efectiva. A través de esta estrategia, el plan de 2024 aspira a eliminar el estigma, sino también a empoderar a la sociedad para que tome un rol activo en el cuidado y la inclusión de las personas con demencia.


Al poner en contraste las estrategias de 2014 y 2024, se observa un cambio de enfoque significativo. Mientras que el plan de 2014 se limitaba a campañas que, aunque necesarias, eran superficiales y fragmentadas, el plan de 2024 busca una transformación cultural más profunda. Sin embargo, la sociedad mexicana ha sido lenta en modificar sus percepciones sobre la demencia, y aunque "Dementia Friends" representa un paso en la dirección correcta, el éxito de este enfoque dependerá de una adopción generalizada y del compromiso sostenido por parte de todos los actores involucrados.



Investigación y Desarrollo: Entre la Esperanza y la Realidad

2014: Primeros Impulsos en la Investigación

En 2014, México dio sus primeros pasos tentativos hacia la investigación sobre demencia, con un plan que reconocía la importancia de abordar la enfermedad desde la ciencia. Sin embargo, estos esfuerzos fueron limitados y desarticulados. La visión era clara: fomentar estudios epidemiológicos básicos y estimular la colaboración internacional. Pero la realidad fue mucho más dura. La falta de financiamiento y un marco institucional endeble dejaron en evidencia que la ambición, sin recursos ni estrategia, es insuficiente para enfrentar un desafío de esta magnitud.


2024: Enfoque Multidisciplinario y Colaborativo

Con el Plan de 2024, el gobierno promete un cambio radical en su enfoque hacia la investigación en demencia. Esta vez, la estrategia es multidisciplinaria y colaborativa, integrando no solo a investigadores médicos, sino también a sociólogos, economistas y expertos en políticas públicas.


Este nuevo enfoque no solo pretende ampliar el conocimiento científico de la enfermedad, sino también abordar sus profundas implicaciones sociales y económicas. Además, el plan hace hincapié en la necesidad de fortalecer la infraestructura de investigación y asegurar financiamiento sostenido, lo que refleja una comprensión más madura de lo que se requiere para avanzar.

Comparando los enfoques de 2014 y 2024, es evidente un cambio significativo en la visión y ambición del país hacia la investigación en demencia. Mientras que en 2014, los esfuerzos eran incipientes y fragmentados, el plan de 2024 intenta centralizar y coordinar la investigación en un marco más coherente y robusto.


Sin embargo, los viejos fantasmas persisten: la falta crónica de financiamiento y la burocracia institucional siguen siendo obstáculos que podrían minar estos nuevos esfuerzos antes de que den fruto. El éxito de este enfoque multidisciplinario, aunque prometedor, dependerá en gran medida de si México puede superar las barreras estructurales que han frustrado los avances en el pasado.


Promesas vs. Realidad

A lo largo de una década, México ha visto cómo sus esfuerzos por enfrentar la demencia han evolucionado de propuestas iniciales a planes más estructurados y ambiciosos. El Plan Nacional de Demencia de 2014 sentó las bases, pero sus logros fueron limitados por la falta de recursos, coordinación y un enfoque integral. Aunque se avanzó en la sensibilización y en la puesta en marcha de programas piloto, muchas de las promesas de 2014 quedaron sin cumplir. El Plan de 2024, por otro lado, promete un enfoque más integrado y colaborativo, con una mayor inclusión de la sociedad civil y un impulso renovado en la investigación. Sin embargo, las barreras estructurales y las limitaciones de financiamiento que obstaculizaron el plan anterior aún persisten, lo que pone en duda la capacidad del país para superar estos desafíos.


Mirando hacia el futuro, es claro que México enfrenta un camino cuesta arriba en la lucha contra la demencia. Las proyecciones indican un aumento significativo en la prevalencia de la enfermedad, lo que subraya la urgencia de implementar con éxito las estrategias propuestas en el Plan de 2024. Si se logran sortear los obstáculos históricos, como la falta de recursos y la débil infraestructura de atención, México podría estar en una posición más sólida para afrontar esta crisis de salud pública. La colaboración Internacional, el fortalecimiento del sistema de cuidados, y la concientización continua serán cruciales para lograr avances sostenibles.


¿Estamos avanzando en la dirección correcta?

La gran pregunta que surge es si México realmente está avanzando en la dirección correcta. y la respuesta es SÍ. Sin embargo, aunque el Plan de 2024 representa un paso adelante en muchos aspectos, su éxito dependerá de la capacidad del gobierno y la sociedad para traducir las promesas en acciones concretas.

Con la voluntad política adecuada y un compromiso firme de todas las partes involucradas, México podría finalmente comenzar a cambiar el rumbo en la lucha contra la demencia. Sin embargo, si las promesas del Plan de 2024 siguen el destino de su predecesor, el país corre el riesgo de repetir los errores del pasado y dejar a miles de mexicanos sin el apoyo que necesitan.


Fuentes: Elaboración de Aditum Institute basado en el Plan Nacional de Demencia 2014 y Plan Nacional de Demencia 2024.


Autor: Christian Pichardo - Managing Partner and Founder

¿Quieres saber más? Contacta a Aditum Institute:

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